El placer que se obtiene no es un fin en sí mismo. Es el medio para despertar los sentidos y lograr una relajación profunda para abrir la consciencia y expandirla más allá del cuerpo físico.
El tantra como amplificador de la potencia sexual
En el libro Tantra – la Sexualidad Sacralizada del Maestro DeRose, se explica que la técnica denominada maithuna tiene la propiedad de aumentar la producción de hormonas y exacerbar la libido. Por lo tanto, predispone al practicante, hombre o mujer, a un estado de alerta biológico para cualquier estímulo sexual.
Eso puede contribuir decisivamente para superar estados de inapetencia, especialmente para aquellas parejas que conviven hace años y cuya llama del deseo parece haberse extinguido. También ayuda a aquellos que tienden a utilizar las relaciones sexuales como una mera necesidad fisiológica, y a quienes no logran permanecer más tiempo en el acto sexual o durar más en la cama al postergar el orgasmo masculino.
Pero como bien señala el autor, esto no es una terapia de pareja. No promete resultados milagrosos para quien tenga algún problema físico o alguna idiosincrasia emocional. Lo importante es que ayuda a conocer a la pareja, y a explotar todo el potencial que el tantra les ofrece para mejorar la relación.